BEGI-ORDEAK:

REMINISCENCIAS DE UN AMULETO EGIPCIO AL SERVICIO DE LOS  NAVEGANTES VASCOS DEL SIGLO XX.

Mar�a Bego�a del Casal Aretxabaleta

(Art�culo publicado en B.A.E.D.E  n� 7 (1997) pp. 267-282; revisado y ampliado por la autora (2002) para el INSTITUTO DE ESTUDIOS DEL ANTIGUO EGIPTO).

"El ojo de Horus", udjat, para los antiguos egipcios, es un s�mbolo protector en el que se mezclan los rasgos del ojo humano con los del halc�n peregrino. Son varias las versiones que explican su remoto origen y siempre est�n en relaci�n con dioses del mito heliopolitano[1]. Una de ellas cuenta que son los ojos del dios supremo Re, el izquierdo la Luna (L. 1) y el derecho el Sol (L. 2)[2].

Otra leyenda identifica el ojo derecho con Re y el izquierdo con otro dios, Thot[3]. Una tercera, la m�s extendida, afirma que el ojo derecho es el de Re, y el izquierdo el del dios halc�n Horus[4], quien dio origen divino a la monarqu�a egipcia y de donde procede el nombre com�n del amuleto: "El ojo de Horus", siempre en singular y haciendo referencia al izquierdo, tambi�n llamado "el sano" o "el ojo ileso".

Fue un amuleto personal muy popular en la civilizaci�n fara�nica y, en forma de colgante, anillo o brazalete, su uso abarc� a casi todos los habitantes del pa�s del Nilo sin hacer distinciones entre las diferentes capas sociales.

Las infinitas variantes conservadas s�lo se diferencian por el tama�o, la maestr�a o torpeza en la ejecuci�n y la calidad del material empleado para su realizaci�n, en ocasiones piedras semipreciosas engastadas en oro o, en la mayor�a de los casos, simples piezas cer�micas hechas en serie.

 

(L. 1) Udjat en un colgante de Tut-anj-Am�n. Museo de El Cairo.

 

(L.2) Ojo solar en un pectoral de Tut-anj-Am�n. Museo de El Cairo

 

Trat�ndose de la representaci�n del ojo izquierdo - cuya simbolog�a es lunar, como ya se ha puntualizado - se trat� de acentuar su car�cter nocturno usando materiales y pinturas de colores fr�os: blancos, azules y negros. Menos frecuente es encontrar este amuleto en forma de ojo derecho - tambi�n se ha dicho que esta forma es la representaci�n del Sol - empleando para ello una gama de colores c�lidos: oro, ocres vivos, anaranjados y rojos. A�n m�s escasas son las piezas en las que el anverso y el reverso del amuleto forman la dualidad astral, es decir, por un lado el ojo lunar y por el opuesto el solar.

Los dos ojos m�gicos enfrentados en un mismo plano se pintaron o esculpieron, con id�ntica finalidad protectora, sobre diversos objetos destinados al uso cotidiano o al meramente funerario.

(L.3) Dibujo de un remo del Imperio Medio egipcio. Museo de El Cairo

 

Pronto, los antiguos egipcios incorporaron este elemento m�gico a la navegaci�n. Pasando por alto los per�odos iniciales de la historia de Egipto[1] - entre 2.920 y 2.040 a.C. - nos situamos en el Imperio Medio (2.040- 1640 a.C.) donde, en cambio, su uso est� perfectamente documentado.

(L.4) Maqueta de una barca fluvial del Imperio Medio. Museo de El Louvre

Las maquetas de barcos, procedentes de las excavaciones efectuadas en las tumbas del Egipto Medio, expuestas en diversos museos, atestiguan el empleo de la udjat en ciertas palas de remo (L. 3) y en las proas de algunos barcos (L. 4). Posteriormente, esculpidas o pintadas en los monumentos tebanos realizados durante el Imperio Nuevo (1550‑1070 a.C.), las brancas de algunas embarcaciones siguen protegidas con un ojo a cada lado. Hay udjat en las barcas que transportan a las divinidades, tanto en los templos como en las tumbas privadas y reales (Ls. 5 y 6). Adem�s de estar representada en las naves de los dioses, lo est�n tambi�n en las destinadas a viajes particulares y hasta en las de carga; en cambio, las remolcadoras (L. 7) nunca aparecen provistas del amuleto[2], puede que por estar adscrita a la barca principal.

 

Usada contra el "mal de ojo", la udjat salt� fronteras penetrando en diferentes culturas mediterr�neas junto con otros talismanes, tambi�n egipcios: escarabeo, anj o cruz de la vida, tiet o nudo de Isis, dios Bes, etc[3]. Pero no nos detendremos aqu� en el an�lisis de la expansi�n de dichos amuletos ni de los cultos sincr�ticos, limit�ndonos a analizar una sola de las vertientes del uso de la udjat, como protectora de la navegaci�n.

 

(L.5) Barca procesional del  dios Am�n de la Capilla Roja de Hat-shepsut. Templo de Karnak.

 

(L.6) Barca solar del dios Am�n �Ra, en la tumba de Seti I. Luxor.

(L.7) Pintura de la tumba de la tumba de Sen-nefer (TT 69b) peregrinando con su esposa al santuario de Abidos, donde la embarcaci�n se�orial aparece protegida por la udjat, cosa que no ocurre con la remolcadora.

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